San Martín de Valdeiglesias ofrece un rico patrimonio cultural y natural, que va más allá de los monumentos del municipio y del famoso pantano de San Juan. Hoy desde Hacienda La Coracera hablamos sobre las pinturas rupestres en San Martín de Valdeiglesias, algo desconocido por la gran mayoría de visitantes.

Descubriendo las pinturas rupestres en San Martín de Valdeiglesias

A un paso de la presa del Embalse de San Juan se eleva el Monte o Cerro de San Esteban. Además de ser uno de los lugares más populares para hacer senderismo de la Sierra Oeste de Madrid, con maravillosos miradores, esconde sorprendentes secretos.

En este caso, nos referimos a dos importantes abrigos, ubicados en la falda sur del monte, dentro del término municipal de San Martín de Valdeiglesias y que fueron descubiertos por F.J. Pastor en 1996.

Muy cerca se encuentran otros dos abrigos, pertenecientes al término municipal de Pelayos de la Presa. En concreto, se conocen como La Enfermería y fueron descubiertos en 1989.

El conjunto de los cuatro abrigos se denominan como Conjunto de Estaciones de Arte Rupestre del Cerro de San Esteban. Pertenecen al Plan de Yacimientos Visitables de la Comunidad de Madrid.

Abrigos del Cerro de San Esteban

Las interesantes pinturas rupestres en San Martín de Valdeiglesias forman parte del mismo roquedo granítico y se encuentran separados por unos 30 metros de distancia.

Sus creadores aprovecharon los abrigos que se generaron de manera natural en la roca, lo que propició su conservación hasta nuestros tiempos.

Sin embargo, los agentes meteorológicos y la ausencia de vallado que los proteja, ha hecho mella en ambas localizaciones.

En las inmediaciones de ambos abrigos se encontraron unos cincuenta fragmentos cerámicos en tonalidades grises, pardas y marrones. También se hallaron cinco evidencias líticas, entre los que destaca un interesante percutor de roca.

Primer abrigo

El primero de ellos tiene unas dimensiones aproximadas de 2×2 metros y está orientado al sur.

En su parte inferior izquierda, aproximadamente a 1,25 m de altura, se puede visualizar un friso con pinturas rupestres. Muestra representaciones esquemáticas o abstractas hechas con trazos de líneas de color rojo anaranjado. Se trata de al menos siete barras verticales de unos 30 cm de largo por entre 3 y 4 cm de ancho.

Segundo abrigo

Este segundo abrigo es de menor tamaño que el otro, contando con 2 metros en su lado más ancho y un metro como máximo de alto.

En este caso, las pinturas se encuentran tanto en la pared como en la visera de roca que la protege. En tonalidades rojas, que van desde el anaranjado hasta el granate, se aprecian una serie de líneas continuas y trazos yuxtapuestos.

Como mínimo se pueden diferenciar claramente seis motivos. Entre ellos destacan líneas paralelas, un motivo esteliforme formado por un círculo con seis pequeños trazos, un zigzag, otro motivo en forma de «v», una línea curva acompañada de un punto y una sucesión de puntos.

Hacienda la Coracera

Disfrutar de las pinturas rupestres en San Martín de Valdeiglesias con Hacienda La Coracera

Estos abrigos son otro de los numerosos motivos para acercarse a conocer San Martín de Valdeiglesias y su maravilloso entorno.

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